Cuando hablamos de nutrición, lo primero que nos viene a la mente es lo
que consumimos en nuestra dieta diaria, y pensar y repasar si ésta
contiene los nutrientes necesarios para estar sanas. Cada día somos más
conscientes de no consumir grasa
para cuidar de nuestro corazón, no consumir azúcar por miedo a las
consecuencias que esto puede tener (caries, obesidad, etc.), no
demasiada sal por miedo a la presión alta, etc. Pero en general, estos
cuidados se relacionan más con el aspecto físico, el peso, etc., que con
la salud de nuestros tejidos y órganos.
Nuestro cuerpo está diariamente expuesto a la excesiva producción de
radicales libres, causada por la contaminación ambiental, el estrés de
la vida diaria, y una sociedad sobre medicada. Y aunque nosotros
tratemos de cuidarnos de una manera natural, no fumando, evitando
químicos tóxicos, controlando los niveles de estrés, etc., es un hecho
que nuestro cuerpo no es capaz de pelear, solo y de una manera natural,
con el ataque diario de los radicales libres. La clave de todo
es el equilibrio en nuestro cuerpo, y necesitamos suficientes
antioxidantes para lograr neutralizar adecuadamente los radicales libres
producidos.
Gracias a múltiples investigaciones médicas, se ha demostrado que el estrés oxidativo es el causante de más de 70 enfermedades degenerativas crónicas que nos acechan hoy en día;
algunas de éstas son: enfermedades del corazón, derrames cerebrales,
cáncer, diabetes, artritis, Alzheimer, lupus, esclerosis múltiple, y la
lista podría no terminar.
El concepto de nutrición celular busca ayudarnos a entender
cómo nuestra salud depende, en definitiva, de la salud de nuestras
células. Esta trata simplemente de proporcionar, por medio de
suplementos balanceados y completos, todos los nutrientes a las células,
en niveles óptimos; cuando se logra esta sinergia se maximiza la
potencia de estos nutrientes; se optimiza nuestro sistema natural de antioxidantes, inmunológico y de reparación. Así es como el estrés
oxidativo puede ser controlado y nuestra salud estará protegida
.
Algunos de los beneficios adicionales que te ofrece la Nutrición Celular:
- Mantiene tu vitalidad, te da energía.
- Te da una apariencia saludable y jovial.
- Ayuda a regenerar diariamente tu organismo.
- Mantiene fuertes los tejidos (incluido el óseo), piel, dientes, etc.
- Reduce el riesgo de padecer enfermedades, pues el sistema inmunológico se fortalece.
- Regula los ritmos fisiológicos.
- Mantiene eficientes las funciones físicas, emocionales y mentales.
- Mejora la eliminación de toxinas.
- Ayuda a mantener el peso y talla ideal.
Aquí te presento algunos consejos prácticos que te ayudarán a retrasar el envejecimiento prematuro.
- Dieta balanceada en calidad y cantidad; evita tóxicos como aceites refinados, azúcar y tabaco.
- Come frutas, verduras, vegetales, granos enteros, semillas, frutos secos.
- Consume con moderación, pollo y otras carnes, mantequilla, queso, huevos y leche; trata de comer salmón, dos veces por semana
- Toma mucha agua, mantendrá tu cuerpo hidratado y limpio.
- Consume poca grasa, de dos a tres cucharadas de aceite vegetal al día.
- Haz ejercicio por lo menos tres veces por semana.
- Utiliza regularmente algún programa de desintoxicación.
- Protege tu cuerpo de los radicales libres, utilizando antioxidantes y suplementos de buena calidad. En la actualidad existen en el mercado varias opciones, de laboratorios muy reconocidos.
Existe una ley natural que dice: “Todo lo que sembramos, cosechamos”,
así que ocúpate de cuidar tu alimentación y los suplementos que puedes
ingerir para cuidar tu cuerpo, célula por célula; recuerda que es el
único que tienes, y de ti depende que esté en las mejores condiciones.
¡Tú generas el cambio!
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