INSTRUCCIONES: ELABORA UN RESUMEN DEL TEXTO (MÍNIMO 10 RENGLONES) IMPRIME Y PEGA EN TU CUADERNO.
IDENTIDAD EN
LA ADOLESCENCIA
“Los
conceptos de adolescencia y juventud engloban un período
transicional con importantes cambios globales (biopsicosociales) en
la persona. Dichas cambios han sido esquematizados dentro del
concepto de “tareas de desarrollo”, que han sido definidas por
Havighurst de la siguiente manera: Surgen
en cierto período de la vida del individuo cuya debida realización
lo
conduce
a la felicidad y al éxito de tareas posteriores, y cuyo fracaso
conduce a la infelicidad del
individuo,
a la desaprobación de la sociedad, y a dificultades en el logro de
tareas posteriores.
La
tarea central de la adolescencia ha sido definida por Erikson como la
búsqueda de la identidad.
Ella se relaciona con el sentirse a sí mismo como estable a lo largo
del tiempo, con
la
adopción de una identidad psicosexual definitiva, expresada a través
de papeles sexuales
socialmente
aceptados, y con la posibilidad de una conducta sexual activa. Muy
ligado a lo
anterior
está el sentirse preparado para la elección de pareja y su
estabilización, generalmente
a
través del matrimonio. Dicha tarea tiene diferentes pasos de
“relaciones de práctica” (pololeos), con grados progresivos de
acercamiento físico, que se consolida al final del período con la
capacidad
de estabilizar la relación de pareja, y de casarse.
Una
segunda tarea del desarrollo adolescente es la separación de la
familia de origen para posibilitar la individuación de la persona.
Esta necesidad del adolescente por definirse a sí mismo (contestando
su típica pregunta de, ¿quién soy yo?) implica un grado de
conflicto, incluso, de rebeldía en la relación con los padres, a
veces necesaria para lograr un nivel suficiente de autonomía
personal. La independencia psicológica es un paso necesario, a veces
previo, otras paralelo, al logro de la independencia social y
económica. Esta separación/individuación se logra en forma
importante a través del desarrollo de lazos amistosos y emocionales
con adolescentes de la misma edad: el centro de gravedad emocional
pasa desde la familia y los padres hacia el grupo de pares. Dicha
transición es importante y especialmente frágil: numerosos
problemas surgen cuando las dos generaciones en juego no permiten que
se atraviese en forma fluida.
Una
tercera tarea de la adolescencia es la definición de la identidad en
el plano de la elección vocacional y laboral. Esta consolidación es
quizá la más influenciada por el entorno sociocultural, geográfico
y económico del joven. El adecuado
equilibrio
entre capacidades, expectativas, logros académicos y oportunidades
laborales determinará, en buena parte, la calidad de vida y
satisfacción personal posteriores del sujeto.
Erikson
ha descrito cómo el desenlace de estas tareas, o “crisis
normativa” de la adolescencia, puede ser la consolidación de la
identidad, avanzando, el adolescente, entonces, a la etapa siguiente
(la del adulto joven) o, bien, quedando en el así denominado
“síndrome de la difusión de identidad”. En éste el sujeto, a
lo largo de su vida adulta, vuelve una y otra vez a tratar de definir
sus áreas de interés o elecciones vocacionales o de pareja.
Un
seguidor de Erikson, Marcia, ha descrito cuatro diferentes etapas de
la identidad adolescente: identidad
lograda,
cuando se ha vivido un período de toma de decisiones y se están
persiguiendo las propias elecciones y metas; identidad
hipotecada,
en que el compromiso con la ocupación y posición existen, pero no
se ha logrado personalmente, sino por el influjo de otros; identidad
difusa,
en la que no se han definido diversas opciones, independientemente de
haber atravesado por un período de toma de decisiones personales y,
finalmente, la así denominada por el mismo Erikson moratoria
de identidad,
en la cual se posterga y se prolonga el período de definiciones
hacia la etapa adulta de la vida”.
CONCEPTO
DE IDENTIDAD PERSONAL
El
desarrollo de la identidad es un proceso complejo que se realiza en
la interacción con otros.
Como
señala Erikson:
“La
formación de la identidad emplea un proceso de reflexión y
observación simultáneas que tiene lugar en todos los niveles del
funcionamiento mental. Según este proceso, el individuo se juzga a
sí mismo a la luz de lo que percibe como la manera en que los otros
lo juzgan a él comparándolo con ellos y en los términos de una
tipología significativa para estos últimos, por otra parte, juzga
la manera en que los otros lo juzgan a él, a la luz del modo en que
se percibe en comparación con los otros y en relación con tipos que
han llegado a ser importantes para él.
Por
suerte este proceso es, en su mayor parte, inconsciente...”
La
identidad representa:
• “La
percepción de la mismidad y continuidad de la propia existencia en
el tiempo y en el espacio, y la percepción del hecho que otros
reconocen esa mismidad”.
Cinco
puntos importantes a considerar sobre la identidad:
• La
identidad se construye en la interacción con otros.
• La
identidad es una definición socialmente construida del ser.
• En
la definición son centrales: la mismidad o sentido del ser, la
continuidad espacio-temporal y reconocimiento por otros de la
existencia.
• La
identidad es un fenómeno eminentemente subjetivo que contiene un
fuerte componente emocional.
• La
formación de la identidad implica un proceso de reconocimiento y
valoración de la propia individualidad, por lo que se asocia muy
estrechamente a la autoestima.
LA
IDENTIDAD DESDE UN PUNTO DE VISTA SOCIAL
Desde
un punto de vista social la identidad puede definirse como: el
sistema unitario de representaciones de sí elaboradas a lo largo de
la vida de las personas a través de las cuales se reconocen a sí
mismas y son reconocidas por los demás, como individuos particulares
y como miembros de categorías sociales distintivas. La identidad es
el principio a través del cual el sujeto define lo que es y lo que
es para otros.
Una
de las dimensiones clasificatorias principales de la identidad es el
género. Muy temprano en el desarrollo de la identidad personal los
sujetos se piensan en tanto mujeres y hombres.
En
sociedades complejas los sujetos suelen tener sentimientos de
pertenencia respecto de una diversidad de grupos o categorías
sociales. Las identidades desde este punto de vista son múltiples y
pueden vincular a los sujetos con una diversidad de grupos sociales,
desde los más próximos al más inclusivo como es la humanidad.
La
noción de identidad como sentido de pertenencia a un determinado
grupo cultural tiene sus orígenes en Freud. Actualmente es una
noción que se utiliza en diversas ciencias sociales, especialmente
en historia, sociología y antropología.